Vente.

Vente. Me voy lejos, buscaba un equipaje de un tamaño adecuado que recogiera todo lo que me hace falta pero no meter de más. Donde entrarán mis sueños pero no entrarán falsas ilusiones. Que fuera lo suficientemente bonito para ser cierto y que fuera fácil de llevar, que los años van pasando y la vida va pesando.
Tú, si quieres, puedes buscar un equipaje también, yo ya lo he encontrado. Me llevo tu sonrisa y lo que conlleva con ello, te llevo a ti. Quizá me equivoque y me arrepienta cuando estemos vagando donde no haya nadie más, pero eso no importa. Si pierdo será cosa mía y si gano podremos contar estar historia más adelante, cuando volvamos. Y entonces sabremos que en algún momento hemos sido uno y que nos ha sobrado el mundo. Quizá estemos solos demasiado tiempo como para darte cuenta que no quieres aguantar mis caprichos, esos que te piden que me beses sin pensar u otros tantos que te pedirán cosquillitas y abrazos. Nunca se sabe, puedes quererme más aun u olvidarte de lo que fuimos y de lo que seré. Prefiero no pensar. Te llevo conmigo. Si tengo que regresar sola, respirare tranquila y feliz y si tengo que volver de tu mano, respirare tranquila y feliz.